Acuerdo entre la Nación y la Ciudad para finalizar la ocupación de los espacios usurpados
En una conferencia de prensa conjunta del Gobierno nacional y de la Ciudad de Buenos Aires, los respectivos Jefes de Gabinete, Horacio Rodríguez Larreta -por la Ciudad- y Aníbal Fernández -por la Nación- anunciaron un acuerdo para descomprimir la situación de la toma del Parque Indoamericano -un espacio público- y de otras propiedades privadas, como el Club Albariño en Villa Lugano, usurpadas so pretexto de obtener una vivienda.
Los dos Gobiernos tuvieron que ceder en esta negociación, lo que de por sí es una buena noticia toda vez que las autoridades nacionales estaban "akostumbradas" a llevarse todo por delante e imponer su criterio por cualquier medio -menos el diálogo-.
El acuerdo alcanzado establece que la Ciudad, además de continuar con la política ya en curso de urbanización de villas, diseñará y presentará un plan de viviendas dirigido prioritariamente a quienes realmente más lo necesiten, uno de cuyos requisitos será tener una residencia no menor a dos años en la Ciudad, y además tendrán que devolver los créditos que se les otorguen.
Para la implementación de los planes de vivienda, el financiamiento correrá por partes iguales, es decir que por cada peso que invierta la Ciudad la Nación pondrá otro peso.
Rodríguez Larreta hizo hincapié en que "las personas que se encuentran en el Parque Indoamericano van a ser incluidas en los planes pero no tendrán prioridad". Para evitar las avivadas, o sea que una persona cobre por lo mismo en más de una vez, se cruzarán las bases de datos de ambas jurisdicciones.
Y finalmente, se estableció de común acuerdo que -a partir de las 9 horas del día 15 de diciembre de 2010- tanto la Nación como la Ciudad sancionarán la usurpación de predios públicos y/o privados, no otorgando ningún tipo de crédito o subsidio social a a quienes cometan ese tipo de delito. Y si ya estuvieren cobrando algun beneficio, el mismo les será retirado, no pudiendo volver a cobrarlo más.
La reacción de los crispados vecinos ante este anuncio fue de un profundo alivio. Es de esperar que se pacifiquen de ahora más los barrios afectados, el nuestro entre ellos.