Septiembre,
2003 - Fuente: Propias y Maristas
La Familia Marista festeja cien años
de presencia ininterrumpida en Argentina, educando, enseñando
y evangelizando a niños y jóvenes. Fue un
25 de septiembre de 1903, cuando los primeros hermanos
iniciaron la obra de San Marcelino Campagnat en Argentina.
Los inicios de la presencia del sueño
de Marcelino en Argentina coincidió con el sueño
que comparten 14 jóvenes Hermanos: ¡Vamos
a ser misioneros!. Este sueño se embarcó
en Barcelona el 3 de septiembre de 1903 en el buque Reina
María Cristina. De los 22 días que duró
la travesía de esta "comunidad a bordo"
sabemos algo de lo que vivieron y sintieron: su profunda
devoción mariana; su amor a la Eucaristía;
la fraternidad marista; la contemplación de la
inmensidad del mar, el cielo estrellado y los delfines;
la cacería comunitaria de una rata que interrumpió
el sueño en su camarote; las tormentas; las descomposturas
y la alegre noticia de un niño que había
nacido. En todo momento los acompañaba un sentimiento
de nostalgia por sus tierras dejadas y su tan querida
comunidad de San Andrés del Palomar, en España.
Pero el deseo profundo que había en aquellos corazones,
el ser misioneros de la Buena Noticia al estilo de Marcelino,
era más fuerte que todo aquello que habían
dejado.
Por fin, el 25 de septiembre divisaron el
puerto de su destino: la ciudad de Buenos Aires. Este
día los Hermanos Frédien, Junion, Paulius,
Sixto, Veremundo, Adolphus y Leopoldo José pisan
las tierras del Plata.
El ambiente en la capital argentina no se hallaba del
todo tranquilo. La prensa anunciaba que a bordo de aquel
buque venían al país un grupo de religiosos
expulsados de Francia. Una multitud había preparado
una recepción hostil a los misioneros; pero una
lluvia torrencial impidió esta concentración.
Aún así, por prudencia, sólo dos
Hermanos descendieron del buque con sotana; el resto estaba
de civil. Allí los esperaba el Hno. José
(coadjutor de los Lazaristas) quien los condujo hasta
la residencia de los sacerdotes.
Un mes más tarde se completó la "comunidad
marista fundadora de la Argentina" con la llegada
de los Hermanos Agritius, Bajulus, Simeón, Arège,
Loger, Donaciano y Olegario. Este grupo de 14 misioneros
destinados a nuestro país había sido separado
en dos debido a la situación religiosa en Francia
y su proyección en el exterior.
A la semana de la llegada del primer grupo,
los Hermanos se hacen cargo de la escuela gratuita de
San Vicente de Paul. Ésta será la primera
escuela marista argentina que los Hermanos llevarán
adelante durante 12 años. En ella tuvieron que
lidiar contra la indisciplina de los alumnos de aquellas
aulas que contaban con más de 60 niños cada
una. También allí funcionó un internado
en el que trabajaban tres Hermanos. Al inicio escolar
del siguiente año abriría las puertas la
escuela de los Hermanos en Luján.
Aquí en Villa Lugano los Hermanos
Maristas están hace casi medio siglo. Hablamos
del colegio Mac Nab Bernal (más
info), donde el pasado viernes 26 de septiembre se
celebró el Festival de la Canción Marista.
Quien hoy dirige este medio de comunicación tuvo
el privilegio de haber compartido durante doce años
-como educando en esa escuela- el proyecto Marista.
A los Hermanos Maristas, simplemente ¡Gracias! |