Martes, 24 de Octubre de 2006

Cestos antivandalismo: ya son más de mil en Liniers y Mataderos

Luego de haber probado su resistencia a muchas manifestaciones en Plaza de Mayo, la instalación de cestos antivandalismo avanza a buen ritmo en la zona que gerencia el Ente de Higiene Urbana. En la experiencia previa, unos 1200 cestos de plástico habían sido atacados por vándalos y su destrucción superó el 20% del total instalado.

En la zona comprendida por los barrios de Liniers, Villa Lugano, Mataderos, Villa Riachuelo, parte de Villa Soldati, Flores y Villa Luro, se habían instalado oportunamente 1.200 cestos de plástico. Apenas unos meses más tarde fueron arrancados de sus sitios por verdaderos vándalos, y más del 20% fueron destruidos. Algunos fueron usados como bombos o como heladeritas para enfriar bebidas. Otros, directamente, fueron incendiados.

Ante esta situación, el Ente de Higiene Urbana decidió no esperar más y atacar el problema mediante la instalación de Cestos Antivandalismo (CAV). Para ello tuvo en cuenta los buenos resultados obtenidos con los 523 CAV que se instalaron, entre otros sitios, en la zona de Plaza de Mayo y que, hasta aquí, "Resistieron decenas de manifestaciones", como han señalado desde la Comuna. Hasta aquí, ya ha colocado 1.000 CAV en Liniers y Mataderos. Se trata de la primera etapa de un plan que continúa y que superará los 2.100 cestos en la denominada Zona 5.

El diseño de los cestos antivandalismo obtuvo el Primer Premio del Concurso Ciudad y Tecnología en el año 2003, y fue autorizado y homologado por el Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires. Están construidos en chapa de hierro doble, decapada y laminada en frío. Son más grandes que los de plástico, lo que puede apreciarse a simple vista. Son a prueba de fuego. El anaranjado estridente los vuelve inmediatamente identificables, su pintura es resistente a los rayos ultravioletas, tienen pintado el 0800 para reclamos, son de fácil acceso para quienes deben recoger los residuos y, sobre todo, no se pueden arrancar de donde se han colocado.

Si bien manchar o ensuciar bienes públicos o privados está penado con una multa de hasta $3.000 , de acuerdo al con el artículo 80 del Código Contravencional porteño, esa conducta raramente genera condenas. Los primeros Cestos Antivandalismo, tuvieron su debut en la Copa Davis, realizada en el Parque Roca, donde fueron colocados estratégicamente dentro del predio y en sus inmediaciones.

Para llevar adelante las tareas de instalación de los CAV, el Ente entrenó y equipó al personal, organizando seis equipos compuestos de dos instaladores cada uno, más los medios necesarios para la movilidad de los mismos y el traslado de los Cestos (con el volumen que ellos representan), logrando instalar unos 80 cestos por día. La última tanda -con la que se ha superado el primer millar- fue colocada en la Feria de Mataderos.

VillaLugano.com.ar

Fuente: Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires