Martes, 3 de Julio de 2007

Argentina Latente, una invitación a crecer pensando en los argentinos

Argentina tiene posibilidades de crecer en base a sus propios talentos y recursos, claro, si aprendemos a superar el colonialismo mental. Pino Solanas muestra distintos ejemplos de productores y creadores argentinos que no son reconocidos en el país. Mucho de lo que se cuenta y se muestra en el filme es poco conocido y descubrirlo resulta fascinante.

Recorriendo lugares como el Instituto Balseiro, la CONEA, los Astilleros Río Santiago, el IMPA, el CONICET, el INVAP y entrevistando a físicos, biólogos, técnicos y trabajadores, el director pinta un panorama dificultoso (lo que el llama el "colonialismo mental", la falta de políticas claras para la ciencia y tecnología en un modelo de país agroexportador, los bajísimos salarios) pero que, asegura, si se corrige, permitirá que la Argentina vuelva a transformarse en un polo industrial como lo fue más de medio siglo atrás.

Argentina Latente se proyectará en el Aula Magna de la Facultad de Ciencias Exactas y Naturales (Pabellón II- Ciudad Universitaria) de la UBA. Entrada $ 2 (para apoyar al cine nacional), el miércoles 4 de julio a las 18.30 horas.

Después de la proyección, habrá un debate abierto con algunos de los protagonistas: Pino Solanas, cineasta y director de "Argentina Latente"; Ruben Fabrizio, ingeniero, Revista Industrializar Argentina y Daniel Minsky, Licenciado en Ciencias Físicas, becario CNEA.

Sobre el debate, invitamos a pensar en la respuesta a la pregunta:

¿Al servicio de quién debe estar la investigación científica nacional?.

La formación académica de estudiantes, docentes y graduados, hoy en día está influenciada fuertemente por dos concepciones "importadas". Por un lado, la “carrera del paper”, donde prevalece el mandato de “publicar o perecer”, y cuyas consecuencias mostró Oscar Varsavsky (1) en lo que llamó la “incorporación pasiva a la gran competencia atlético-científica del Hemisferio Norte”. Por otro lado, el mercantilismo científico, cuando la ciencia sirve fundamentalmente a los intereses de los grandes monopolios, como parecen demostrarlo (actualmente) los acuerdos del sector científico estatal y la universidad con multinacionales, ya sea “tecnológicas” como Techint, Microsoft y Monsanto o directamente extractivas como las petroleras Repsol y Pan American y gigantes mineros como la Barrick, profundizando el modelo agrominero exportador.

(1): Oscar Varsavsky nació en Buenos Aires el 18 de enero de 1920. Egresó como doctor en Química de la Facultad de Ciencias Exactas de la Universidad de Buenos Aires. Fue uno de los primeros y más destacados especialistas mundiales en la elaboración de modelos matemáticos aplicados a las ciencias sociales. Profesor universitario de Matemática y Física, de gran cultura científica, jamás creyó que los aspectos esenciales del conocimiento actual fueran lo suficientemente difíciles como para escapar a la comprensión de las grandes mayorías. Falleció en 1976.

Hernando Mankus

Fuente: Grupo de Gestión de Políticas de Estado en Ciencia y Tecnología