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Mirando ahora hacia dentro del barrio vemos que las dos manos están separadas por una vereda arbolada. Los árboles están desarrollados, pero ¡parecen tan pequeños al lado de tanto cemento!. Hacia el fondo la avenida hace un zig-zag, rodeando el Centro |
Cívico. Y antes de bajar del puente, vemos (hacia la torre del Parque de la Ciudad) algunos de los edificios más nuevos, que se alzan a buena distancia uno del otro, poniendo de relieve otro concepto arquitectónico. |
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Es que Lugano I y II (así se llamaba al Barrio General Savio al comienzo, en la época de los gobiernos militares) parece haber sido construido como si fuera la Gran Muralla China, pues impide a los que estamos de un lado o del otro que podamos ver más allá de esta |
barrera visual. Bien, llegamos al zig-zag de la Avenida y hacia la derecha vemos la tira de edificios que sin interrupciones ha girado unos 90 grados y se prolonga hacia la Av. Larrazábal por la calle Ramírez. Hacia el otro lado (foto de abajo), con simetría casi perfecta, el conjunto de edificios, su cemento y la falta de resquicios, se extienden a lo |
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largo de la calle Costa Magna, hacia una no tan lejana Cafayate. Vale la pena acotar que desde el comienzo del recorrido padecíamos el sonido constante y molesto que se generaba en el autódromo, donde seguramente se entrenaban pilotos de Turismo Carretera. |
Estamos caminando por la mano derecha de Soldado de la Frontera, hacia la Av. Cruz, y a la altura de lo que se llama genéricamente Centro Cívico subimos a una pasarela que linda los fondos del supermercado Coto, instalado en el barrio hace pocos años. |
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